Jornada nacional de lucha de trabajadores cooperativistas

De nuestra mayor consideración,

En la mañana del día jueves 30 de mayo de 2013, cientos y cientos de compañeros y compañeras muy humildes, de unas 13 provincias de este País, salimos muy temprano desde nuestras casas. Somos unos/as 3200 en total, aproximadamente.
Llevamos los chicos con nosotros, o hemos arreglado dejarlos a cuidado de cualquier pariente que nos ayuda. Hemos preparado comida entre varios y la llevamos apelmazada en incómodas cajas, atadas con cuerdas para poder cargarlas a cuesta, o a veces en un changuito con ruedas. Además llevamos abrigo porque es invierno, llevamos banquitos para sentarnos. Cada mamá y papá llevamos dos o tres chicos al lado, y los más chiquitos los llevamos atados a la espalda, como Ud. conoce que los llevamos las compañeras paisanas.
Parecemos brigadas de equecos, todos cargados, caminando cuadras y cuadras en fila india, por barrizales, rutas y avenidas. Buscamos los empobrecidos trenes de las localidades del conurbano, los que funcionan, o le mangueamos a los colectiveros, para que nos lleven en pequeños grupos. Rebotamos un par de veces, pero por decisión insistimos, hasta que al fin lo conseguimos.
En las otras provincias, más bien caminamos, y solo caminamos, muchísimas cuadras, porque sucede que los barrios pobres siempre están por la periferia.

Vamos a manifestarnos, animosa y conscientemente, hasta las delegaciones de vuestro experimentado Ministerio en cada una de las provincias, porque en serio necesitamos la ayuda de Uds. para trabajar más y ganar mejor.

La inflación nos está afectando, si Ud. quiere no la que dicen otros, aún la del propio INDEC nos está matando. Porque a diferencia de otros/as trabajadores/as, en nuestro caso no hay paritarias, no hay aumento alguno, aparte de todos los otros “no hay” que ya vienen desde hace unos 15 años. No hay vacaciones pagas, no hay aguinaldo, no hay licencias por estar enfermos, no hay para comprarse un lavarropas, no hay un resto para sacar los chicos a pasear, o para regalar algo lindo en un cumpleaños, no hay para darle a la familia prácticamente ni un solo gusto.

Somos compañeros y compañeras que trabajamos todos los días. Trabajadores/as altamente precarizados/as.
Lo hacemos en cooperativas ya con trayectoria, o en humildes productivos de hecho, que se han podido levantar con verdadero esfuerzo y muchos años de militancia.
Productivos de costura, grupos de construcción, herrerías, carpinterías, panaderías, rotiserías y bloqueras. Instalación de redes de agua, servicios de limpieza y saneamiento, infraestructura social, o limpieza de arroyos, Trabajamos también en precarias guarderías que sostenemos a pulmón entre todos/as nosotros/as, para poder dejar los/as chicos/as mientras vamos a trabajar. Muchos/as más trabajamos por casi nada en merenderos y comedores, que nos ayudan a pilotearla para llegar.

Pregunte Ud., Sr Ministro, sobre nosotros a varios de los funcionarios que trabajan en ese Ministerio, que ya bastante bien nos conocen. Nos hemos capacitado en los oficios bien a los tumbos, como hemos podido y de puro guapos (nunca nos ayudó para eso seriamente su Ministerio). Hace rato que hemos plantado ya muy bien una capacidad productiva. Tenemos nuestros clientes, hemos sido proveedores del Estado (y no sólo por un programa), y hasta ganado licitaciones en varios rubros. Pero como Ud. bien podrá intuir, porque es una persona formada y con experiencia e información, efectivamente nuestros ingresos no alcanzan para cubrir nuestras necesidades. No alcanzan, y donde menos alcanzan, es en las tan sufridas provincias. En el NOA, en el Chaco, en Misiones, en ciudades grandes como Córdoba y Rosario, en Mar del Plata, es en serio que no nos alcanza, porque todo, tanto la actividad económica, como también la ayuda del Estado, todo es allí más escuálido. Algunos/as de nosotros/as, no todos, obtenemos una ayuda de ese Ministerio que es valorada porque todo suma, pero que se mantiene congeladísima desde hace mucho en miserables $ 750, o en $ 800.

Ese 30 de mayo llegamos al Ministerio central y a las GECALES casi a la misma hora. Estamos organizados/as. No tendremos colectivos para realizar nuestras marchas, pero estamos organizados. En las GECALES somos recibidos y conversamos, pero nos dicen que todas las decisiones provienen de Buenos Aires. En Buenos Aires unos 1.800 compañeros/as no dejamos de cantar frente al Ministerio central. Cantamos que la AGTCAP está, que la FOB está, que el MTR está, pero que no está Tomada, ni Deibe ni Ullua…
Gastando fondos, hemos venido cinco delegados desde diversas provincias. El experimentado Ministerio decide no recibirnos, y nos lo hace saber. Es experimentado porque sabe manejar con pericia estas situaciones. Tiene la teoría que no hay que atendernos ante la movilización, y la lleva hasta el final, sin importar que los/as delegados/as hayamos viajado raspando la olla, y que los 3.200 cumpas hayamos peregrinado por una respuesta. Sólo permaneciendo e incrementando la protesta logramos que nos atiendan, unas cuatro horas más tarde. Ullua nos escucha y primero que nada nos dice que NO al aumento.
Nos promete reunión al día siguiente para avanzar con los demás reclamos, y nos pide que elaboremos a toda velocidad anteproyectos para considerar su preaprobación. Nuestro pedido, aparte de una paritaria social general, es la aprobación de unos proyectos para construir nosotros mismos nuestras escuelas de oficios, nuestros talleres productivos, nuestras guarderías y centros comunitarios. Pedimos también para construir una “Casa de la Mujer”, donde contener a las compañeras que necesitan zafar de la violencia de género. Pedimos ayuda para sostener el funcionamiento de las escuelas de oficios. Pedimos extender las cooperativas que acceden al Programa de Trabajo Autogestionado, y más cantidad de suplementos salariales de $800 para los/as trabajadores/as cooperativos/as.
No hemos decidido movilizarnos de buenas a primeras. Muchas de las cooperativas están esperando desde hace meses ser formalizadas. El aumento lo venimos pidiendo desde el año pasado. También el ingreso de nuevos/as compañeros/as a los programas.

Al día siguiente, vienes 31 de mayo, 15 horas, los delegados estamos firmes en la puerta del Ministerio, carpetas con anteproyectos en mano, y con la expectativa de todos los/as compañeros/as fijadas en nuestras mentes. Nos reciben solo para escuchar de vuelta todos nuestros pedidos. Finalmente, la única respuesta es que nos piden esperar hasta el viernes 14/6 para evaluar los anteproyectos, previa visita de los lugares donde queremos que funcionen. Hasta ese día esperamos, para todas las respuestas, incluso para las que esperamos desde hace meses, ¿Qué otra nos queda?

Nunca vinieron a visitar ni un solo lugar… El viernes 14/6 concurrimos a la nueva reunión. Nuestros/as compañeros/as de todo el País están bien informados a través de las asambleas, y esperando. A todo esto, nosotros ya hemos elaborado nuestros proyectos, para llevarlos listos. Densos formularios, planos y cálculos, contratos de comodato, todo. La reunión dura 15 minutos. La respuesta es desastrosa. El experimentado Ministerio nos dice prácticamente a todo que NO.

Ustedes, Sr Ministro, eligen jugar con todos/as nosotros/as. Directamente burlarse. Tienen la teoría que siempre tienen que darle prioridad a romper las unidades entre nuestras organizaciones.
Siempre lo han hecho así. Tienen una vieja escuela. Nosotros no tenemos micros para movilizarnos porque somos organizaciones independientes. No dependemos de nadie. No apoyamos a ningún candidato, a ningún partido, y queremos mantenernos así, independientes. Estamos haciendo un reclamo de necesidades y de derechos, para miles de trabajadores/as altamente precarizados/as. Somos trabajadores/as que el capitalismo y los gobiernos dejaron en la lona, nomas tirados ahí en la calle, y que todavía estamos muy lejos de acceder a una vida digna.
Estamos haciendo esta movilización por cosas que pensamos son justas, no nada más para molestar. Solo queremos trabajar más y ganar para vivir. Ya hemos vivido mal por bastantes años, y a esta altura pensamos que nos merecemos vivir mejor. Pero el experimentado Ministerio se ocupa más que nada de las grandes políticas, no se deja sensibilizar por reclamos acotados y puntuales de grupos imposibles de ser cooptados. Para las organizaciones que luchamos, vuestro manual dice que lo primero es dividirles sus unidades.

Ustedes trabajan deliberadamente para dividirnos, y operan sin miramientos. Nos ofrecen concesiones por separado pretendiendo secreto, pero si estamos juntos, se ponen duros. Pero nosotros no somos la Federación Agraria, ni la Sociedad Rural, ni la Mesa de Enlace. En lugar del manual del respeto y el fortalecimiento de las organizaciones populares, que está vigente en otros países de nuestramerica, resulta que Uds. agarraron un manual más viejo, requeteviejo, el que dice divide al pueblo para reinar, no dejes que se organice. Más que burdas son sus maniobras, y aún así les han venido funcionando tantas otras veces, sencillamente porque juegan con los recursos y con las necesidades de tanta gente, y cuentan con toda la estructura del Estado para lograrlo. ¿Qué les importará a Uds. que los “equecos” estemos aprendiendo en serio a empoderarnos de nuestro destino, hacernos protagonistas? ¿Qué les importará ningunear nuestras expectativas y nuestro esfuerzo? ¿Qué les importará ofender a nuestras organizaciones? ¿Qué les cuesta utilizar tanta pericia, y ese poder, para desarmarnos? De tan experimentados que están sus funcionarios, está visto que ni un escozor les provoca el negarnos lo que merecemos y necesitamos. Ni un escozor, la ineludible comparación con tanto generoso subsidio para empresarios, o el cuestionamiento popular por su utilización fraudulenta. Justo exactamente lo que sucede por ejemplo con nuestros empobrecidos trenes, que no porque sí nomas están que se despedazan.

Ya que estamos, conozca Ud. que con los programas del otro Ministerio que coordina con Uds, el de Desarrollo Social, también hace años y años que damos vueltas. Ellos han sido más que campeones en operar para dividirnos (incluso quizá los que han escrito sus manuales). Y a pesar de todo lo muchísimo que bregamos y reclamamos desde 2009, no podemos lograr que sus programas sean tan solo lo que dicen ser, simplemente programas para que “Argentina trabaje”.
Apenas sucede que la gente cobra, pero la verdad es que más nada prácticamente funciona. Insólitamente, estamos cansados de luchar para trabajar seriamente, y de tanta burocracia y malversación de los recursos destinados a los elementos de trabajo, resulta que no podemos lograrlo!!!

Todo lo que nos pidieron lo hemos hecho, en tiempo y forma. Proyectos en cien formatos, planillas de todo tipo, compañeros/as postulados para todos los roles, planos técnicos de todos los colores, 25 interlocutores distintos del Ministerio, más de 300 reuniones, varias movilizaciones, y el resultado, al día de hoy, en términos concretos, objetivamente no supera un 20%!!! Desde el año 2009!!! Y para la mayoría de las otras provincias del país, ¿trabajo para nosotros?, directamente nada. Nada de nada.

Sepa Ud. entonces, Sr Ministro, que toda nuestra decisión y altura moral para seguirle reclamando con dignidad nuestros derechos al Estado, ese mismo Estado que fuera artífice de arrojarnos a la marginalidad, y de mantenernos ahí, sigue incólume. Y que los lazos de unidad entre estas organizaciones, que no se venden ni se dejan chantajear, siguen intactos.
Atentamente,

FOB – AGTCAP – MTR