La violencia en las familias, la violencia doméstica, tiene raíces culturales muy profundas, es una conducta aprendida, de transmisión generacional. Por lo cual es importante comprender que no se trata de un fenómeno aislado. Se da en todos los niveles sociales, atraviesa todos los grupos y todos los niveles educativos. Se caracteriza por tipologías diversas como el maltrato físico, psicológico, abuso sexual, abandono y negligencia. El aumento significativo de situaciones de violencia en las familias hace imprescindible la lectura crítica de marcos teóricos producidos profesionales que se desempeñan con idoneidad en este campo. La intención de este curso es promover la construcción de saberes y prácticas con fuerte sentido comunitario.