“Lo histórico, lo teórico y lo metodológico” es una organización de escritos, ponencias y artículos trabajados en los últimos años.
El título marca ejes que resultan claves para revisar, interpelar y repensar la Intervención en lo Social en un diálogo permanente entre ésta, el contexto y la historia. Una de las características más apasionantes se presenta justamente en la posibilidad de entender lo macro social desde lo micro, permitiendo un lugar de diálogo con la cultura, la historia y los diferentes escenarios de intervención.
En clave de hacer, la lectura de lo social es inevitablemente móvil, dinámica, cambiante, compleja, dando un panorama de la sociedad que la muestra como algo en permanente construcción y deconstrucción; es decir que permite leerla más allá y más profundamente que un simple entrecruzamiento de indicadores y variables socioeconómicas.
En el presente texto, el arranque de las prácticas desde la historia intenta hacer dialogar acerca de la construcción de éstas en diferentes escenarios y condiciones, pero especialmente intenta reflexionar acerca de las marcas del pasado en el presente. De ese modo se repasan algunas claves históricas que van desde el conflicto entre Civilización y Barbarie, sus influencias en la construcción de subjetividad, las prácticas y las instituciones. Es un camino que se construye a partir de desear reconocer los aspectos fundacionales y sus contradicciones en las prácticas actuales.
Estos textos incluyen algunas cuestiones metodológicas desarrolladas por el autor en diferentes escritos, como por ejemplo en el libro “El lugar, la palabra, la mirada y la escucha: entrevista e intervención social”, publicado por Espacio Editorial.

Este libro es el producto de una serie de trabajos realizados por el autor en el marco del Doctorado en Ciencias Sociales de la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad de Buenos Aires, a partir del interés hacia el pensamiento Positivista Argentino y su relación con la higiene médica, especialmente en clave de intervención social.
Se trata de desarrollar un análisis del discurso médico desde su carácter performativo y su modo concreto de operar, desde que la medicalización ha logrado influir en lo cotidiano, recorriendo caminos siempre relacionados con el poder político y económico.

La Medicalización se imbrica con las características de una civilización (europea moderna) que nació en medio de grandes tensiones y temores, planteando un discurso médico que, desde las épocas de la Peste, se conformó como un refugio, una especie de lugar de explicación de la vida y de la muerte que de a poco fue suplantando a la religión, tomando de ella los aspectos más vinculados con el control social.
Así, la Medicalización se hizo dueña de la vida, desde el nacimiento y hasta de la muerte, construyendo el telón de fondo de la intervención social.

La medicalización atraviesa hoy todas las esferas de nuestra vida cotidiana: vestimenta, formato de las viviendas, alimentación, sexualidad, etc.
Se construye como un control político de los cuerpos que se presenta como inexorable.
La mirada a la historia de la construcción de esta forma de saber y poder es una especie de viaje en el que el descubrimiento de algo no visto está siempre presente como trasfondo, por lo que es necesario observarlo en clave de intervención de un hacer definido, organizado y significativamente social.